Esta es una cerveza bastante famosa - casi legendaria - en todo el Caribe y en la ciudad de Miami. Comenzó su producción en 1938, bajo licencia de una productora británica. En 1985, trató de subirse al éxito de Heinecken en todo el mundo y comenzó a exportar a los EEUU en envases verdes, en vez del tradicional marrón oscuro. El truco resultó ser un gran fracaso, pues no fué reconocida por los caribeños viviendo en EEUU, ni por los turistas americanos que la conocían de Jamaica.
Finalmente, el real despegue de Red Stripe - tanto en su propia tierra como en Norteamérica - vino en los ´90s cuando comenzó a realizar festivales de música reggae y ska. Algunos de estos han llegado a ser famosos internacionalmente como el Reggae Sumfest y el de Montego Bay, y con ellos, la Red Stripe se convirtió en la marca obligada en salas de baile, pubs y bares de la onda.
La Red Stripe es una cerveza ligera, de 4.7 grados de alcohol - bajo en términos caribeños - suave, agradable y que viene muy bien para pasar el calor. Su sabor amistoso permite beberla sola o acompañando alimentos, con los que no competirá en sabor.
No quedó anotada entre mis favoritas, pero no hay que mirarla en menos. Cumple el objetivo esencial - una sabrosa bebida helada, placentera al paladar y, generalmente, a un precio muy accesible.
Sin aplaudirla de pie, me gustó. Para más bla blá al respecto, clickear en la etiqueta cerveza aquí abajo.
1 comentario:
Una de nuestras lager caribeñas favoritas. Refrescante y muy agradable.
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