04 septiembre 2012

Primer día, otra vida empieza

Llueve en  Hamilton. También en Toronto. Lluvia mañanera en todo el sur de la provincia de Ontario, Canadá. Para la tarde anuncian rayos y truenos.
Así les tocó el primer día de clases de este año escolar a niños, adolescentes y estudiantes en general. Como confirmando el término del verano y de las vacaciones.

Septiembre es el mes de regreso a clases en el hemisferio norte. Es como el marzo de Chile (y de todo el hemisferio Sur). Septiembre es principios de otoño aquí, Marzo lo es allá. Recuerdo que también en Chile  Marzo era un mes bastante inestable, con unos días de intenso calor y otros nublados y lluviosos.
Uno tenía que vestirse con el uniforme oficial, chaqueta azul, pantalones grises, zapatos negros. Era obligatoria también, una corbata azul o que podía variar si se pertenecía a algún colegio particular o comunitario. Después cambiaron esa ley, en la época caliente del año se podía ir al colegio sin corbata. Pero la calurosa chaqueta se mantenía, aunque los alumnos fueran a algún colegio en medio del desierto de Atacama. Así es Chile.

El día de regreso a clases es un día especial para todos: para los que al colegio por primera vez, los que entran a Cuarto Medio, su último año antes de salir al mundo definitivamente. Los que van a la universidad, o a algún instituto, a comenzar vidas de adultos, llenos de sueños y esperanzas.
Aquí, es día de ojos llorosos para mamás y papás, que van a dejar a hijas e hijos a alguna lejana universidad o college. En Canadá, en EEUU, en Europa, un gran porcentaje de ellos ya no regresará a casa... conocerán a alguien, se irán a vivir solos, o con ‘room-mates’. Es un día de adiós, con abrazos y lágrimas. Es un día de cambio para la familia entera, la que ya nunca más volverá a ser lo que fué.

Primer día de clases. Lluvioso y nublado en el sur de Ontario. Mañana, dicen, volverá el sol y el calor.

2 comentarios:

Juan dijo...

tremendo post, me acuerdo yo tambien de mi epoca del colegio, algunos buenos recuerdos, otros no tanto.
Y marzo es un mes raro, como muy complejo, muchas cosas pasan, muy ajetreado. Me imagino que septiembre debe ser igual.
Me acuerdo mis primeros dias de clases en la básica, siempre hacía mucho calor los primeros días y nunca faltaba el desmayo de un compañero por el calor cuando nos ponían en la formación.

franhilz dijo...

exacto, Juan, el calor seguía cuando todos ya pensaban que estaría más frío. y uno, con chaqueta y corbata, transpiraba la camisa blanca hasta hacerla gotear.
qué recuerdos! (chocheos les dicen allá ahora)